Las estigmatizaciones palaciegas

EL BLOQUE INTELECTUAL DE LAS FARC es el nuevo término que, en uno de sus ataques esquizofrénicos, acuñó el Sr. Uribe para estigmatizar a los Colombianos y Colombianas por la Paz, CPP. Ya no sabe qué más hacer o decir para poner en la mira de la delincuencia a quienes nos hemos opuesto a sus conductas tiránicas y demenciales.

Si formar parte de CPP y buscar una salida negociada al conflicto que vive el país, además de traer al seno de sus familias a cada uno de los secuestrados nos pone en la mira de los organismos de seguridad del Estado o de la delincuencia que apoya al Gobierno, pues es un reto que miles de ciudadanos estamos dispuestos a aceptar. En cambio no vamos a tolerar las estigmatizaciones provenientes de la Casa de Nari, por lo que estamos prestos a desenmascarar al Sr. Uribe ante los organismos de Derechos Humanos y asociaciones internacionales de periodistas.

Faltaba más que debamos tener la autorización del régimen para promover iniciativas como el intercambio humanitario. Con buen juicio lo dijo Alan Jara: el único inamovible es el árbol al que tienen amarrados con cadenas a muchos de nuestros compatriotas.

Al Sr. Uribe no le basta con estigmatizar a Piedad Córdoba y a los miembros de CPP, sino que además ahora nos indica, ordena y conmina a los periodistas a ejercer nuestra profesión como a él le dé la gana y siguiendo sus torcidas normas de la nueva moral y ética del régimen. Y no contento con ello se refiere a algunos de nosotros como guerrilleros y mentirosos.

No es la primera vez que el Sr. Uribe ataca de manera afrentosa a los periodistas por estar en el lugar de la noticia como pasó con Hollman Morris. Ya en el pasado se ha metido con otros colegas, siempre como es característico en él, para ocultar sus propios y dolosos errores.

Al Sr. Uribe se le llena la boca diciendo que los periodistas tienen todas las garantías y que incluso algunos de ellos, entre los que me encuentro por supuesto, hemos vuelto al país gracias a sus políticas de seguridad ciudadana. Se equivoca el Sr. Uribe, pues en lo que a mi toca he decidido volver al país para unirme a CPP y, por supuesto, a todos aquellos movimientos que dentro del margen de la ley se opongan a un régimen que pretende perpetuarse en el poder.

Entre Uribe y los jueces que ordenan indebidamente rectificaciones, el periodismo en el país pasa por uno de los peores momentos. La prensa en Colombia está siendo amordazada y los periodistas estigmatizados. ¿De qué libertad de prensa hablaré el Sr. Uribe? Me imagino que de la libertad que gozan los comunicadores abyectos al Gobierno y que poseen, cosa inaudita, cuotas de poder en algunos cargos públicos.

Por supuesto que las decisiones contra Alejandro Santos y María Jimena Dussán ponen una vez más de manifiesto que cuando no es el Gobierno, son algunos jueces los que pretenden amordazarnos con órdenes de arresto y carcelazos. ¡En eso quedó nuestra democracia!

Por: Felipe Zuleta Lleras
felipezuleta.blogspot.com